
Nereidas vulnerables a los anzuelos, nunca será asunto digerido.
Solo allí, donde comunicarse es posible mediante melodías.
Tan diferente a la superficie: solo se escucha a quién más grita.
Al aire su cabello se enmaraña, nunca podrá tocar el cielo.
Las estrellas se secarían. Se cubrirían de arena. No tiene caso.
Su naturaleza no ha de ser domesticada.
Aún asi cayó entre redes.
Y la ves...debatiéndose....
carnada o mandibula.
No hay comentarios:
Publicar un comentario