
Volviste a caer aferrado a tus propias fábulas, escatimando crédito para tus ojos.
De otra manera no podrían solventarse las segundas, terceras, vigésimas oportunidades.
Rotando en torno al mismo eje... obteniendo las mismas respuestas, censurando tus propias preguntas.
¿Creamos y creemos en utopías para entretener nuestro presente...(desatender?)(desentendernos de...) ?
Cuán peligroso es alcanzarlas?